Una sopa es capaz de devolvernos el alma al cuerpo, es reparadora. esta sopa en
especial es deliciosa por el sabor de los hongos que resultan tan exóticos. Pueden usar
los champignones de Paris (blancos), portobellos, shitake o los ostra. Si combinan
varios es mejor, pero el que le va a dar un sabor inconfundible son los hongos secos,
también conocidos como funghi porcini.
Un chorrito de crema y unos cubitos de pan tostado son el toque final que no le puede
faltar para que el sabor sea completo.
Ingredientes
1 cebolla de verdeo
Aceite de oliva c/n
2 dientes de ajo
500 g de variedad de hongos frescos
100 g de hongos secos
150 cc de jerez
500 cc de caldo de hongos o de verduras
Sal, pimienta y nuez moscada
1 cda. de salsa inglesa o Worsestershire
Perejil picado
Procedimiento
Hidratar los hongos secos en medio litro de agua sin sal. Para concentrar el sabor en
los hongos, hidratarlos agregándole al agua un saquito de té negro. Reservar el jugo.
Saltear y dorar la cebolla picada en aceite de oliva. Agregar el ajo picado bien finito y
saltear cuidando que no se queme. Desglasar con el jerez o eventualmente con vino
blanco y cocinar un par de minutos hasta que suelte el alcohol.. Retirar y reservar.
En la misma sartén, agregar un poco más de aceite de oliva y saltear los hongos
previamente picados o procesados. Recuerden no remover los hongos durante la
cocción para que no suelten liquido.
Cuando estén bien dorados, agregar la cebolla y el ajo y el caldo reservados. La
cantidad de caldo que se agregue es lo que le va a dar más o menos consistencia a la
sopa, de manera que pueden jugar con la proporción de caldo a gusto.
Condimentar con sal, pimienta, nuez moscada y agregar una cucharada de salsa inglesa.
Dejar enfriar un poco y licuar con licuadora o robot de mano hasta lograr una consistencia
cremosa.
Por último incorporar el perejil picado y servir.